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Anna Ginsburg usa la animación y el cine como medios para fomentar la visualización tanto de las cualidades como los defectos de la industria de la moda.
Anna Ginsburg es una directora de cine originaria de Reino Unido que trabaja con una variedad de técnicas y medios, que incluyen animación 2D tradicional dibujada a mano, stop-motion y live-action. Bajo su dirección, ha creado varios cortos animados que hablan sobre las virtudes y áreas de oportunidad de las industrias creativas, especialmente de la moda.
«Un problema fundamental para crear conciencia sobre la explotación de la industria de la confección es que todos estamos tan distanciados de tantos procesos detrás de las cosas que consumimos.
Los cortos animados pueden ser una llamada a la acción.”
Anna Ginsburg, directora de animación
Según Anna Ginsburg, la animación y el cine son modos excelentes para fomentar un pensamiento más profundo sobre los temas tabús y problemáticas de nuestras sociedades, por medio de los cuales promueve peticiones que impulsan legislaciones para resolver conflictos sociales y económicos. En los vídeos animados que dirige, se aprecian diseños de personajes fashionistas proporcionados por colaboradores talentosos de su equipo, tales como Viktoria Cichón, dando además un gran ejemplo de gestión de equipos creativos a nivel internacional.
Por ejemplo: en «Good Clothes, Fair Pay», uno de los cortos animados en conjunto con la plataforma sin fines de lucro Fashion Revolution, en 33 segundos Anna Ginsburg denuncia que la Unión Europea es la zona con mayor importación de ropa, con más de 260 mil millones de euros en ventas previstas solamente para 2022, y aún así, la mayoría de las personas que fabrican las prendas ganan salarios insuficientes, mientras que las marcas siguen obteniendo enormes beneficios.
What is Beauty? from Anna Ginsburg on Vimeo.
Lo genial del trabajo de Anna Ginsburg, egresada de Edinburgh College of Art, es que en los cortos animados se esconden capas de narrativa visual en las secuencias: por decir y tomando el mismo vídeo de «Good Clothes, Fair Pay» como ejemplo, el momento en que la aguja de una máquina de coser se atasca y las telas se deshacen, hay flores marchitándose simultáneamente y el clima cambia a una lluvia tormentosa.
«Trato de hacer que mis transiciones sean lo más inesperadas y satisfactorias posible, así que disfruté animando el momento en que el martillo del juez rompe el bloque de madera y se divide en discos, uno de los cuales se convierte en una moneda.»
Anna Ginsburg sobre sus procesos de diseño de secuencias
Anna demuestra sensibilidad, audacia, pero sobre todo, consciencia del poder de las imágenes, decidiendo utilizarlas como herramienta para hacer del mundo un lugar más justo y bello mientras rompe los códigos sociales mediante humor y poesía, creando animaciones en diferentes técnicas que abordan temas tabú como la migración, la explotación laboral y la cultura consumista en la moda, la sexualidad y más.
La directora británica nos brinda un ejemplo positivo de viralización digital; la artista compagina sus proyectos personales con comerciales, docencia y vídeos musicales. Anna menciona además que, aunque en este presente el sistema capitalista la publicidad sea la única gran forma de ganar dinero como creador de contenido, se trata de hacer trabajos que no vayan en contra de la ética del creador.
«No siento que necesariamente necesite esos comerciales, el dinero no me motiva. Puedo hacer uno o dos anuncios al año y luego usar el dinero para tomarme el tiempo de hacer mis propias cosas.
Es solo un equilibrio.
Le diría a las personas creativas que se dedican a la publicidad: no den por sentado su impulso creativo porque podría apagarse.»
Anna Ginsburg, directora de animación en entrevista con Metal Magazine